A través de las redes los guardaparques hicieron pública la situación.
Municipios 11 de enero de 2023 AHORAONLINE
Guardaparques de Parque Pereyra utilizaron las redes sociales para denunciar a un barrio privado que arroja basuras en el lugar.
"Alguien que no es personal del Parque colocó hace un tiempo un cesto en la esquina de 403 y Centenario, que cada tanto aparece desbordado de basura y perros destrozando bolsas en un gran desparramo», denunciaron.
"Averiguaciones de este Cuerpo de Guardaparques llevaron a la información que buscábamos: un barrio cerrado que se encuentra solo a metros de este lugar, sobre la calle 403 en dirección al Camino Gral. Belgrano. Como no es cool tener cestos frente al country, tiran toda la basura de un barrio para que nos ocupemos de ella en el Parque", expusieron.
"Se supone que pagan impuestos municipales y que la delegación Villa Elisa debe retirar sus residuos. No lo tenemos que hacer desde el ámbito provincial, ni tampoco tirarle la basura al municipio de Berazategui, ya que del lado que lo colocaron la Municipalidad de La Plata no lo levanta", explicaron.
"Solicitamos que al que lo colocó lo ponga donde debe estar, porque de no suceder lo sacaremos nosotros", advirtieron.
"Es fácil culpar al abandono del Parque, pero a algunos vecinos totalmente desamorados de este bien común de todos los ciudadanos, no les importa vivir frente a un basural que ayudan a que crezca todos los días con su mugre" finalizaron.
El cuerpo presentaba un orificio de salida en la parte superior craneal, compatible con el uso de dicha arma de fuego.
La polémica se centra en el desmonte descomunal que se está llevando a cabo en la zona, donde se están talando árboles centenarios para dar paso al desarrollo inmobiliario.
La investigación se originó a partir de denuncias que señalaban a un individuo identificado como Enrique, quien supuestamente comercializaba estupefacientes a través de su vehículo Renault Sandero, en la zona de Pueblo Nuevo de Berazategui.
Durante la inspección del vehículo, se encontró una pistola marca Browning calibre 9mm con la numeración suprimida, junto con dos cargadores. Uno de los cargadores contenía 13 municiones, mientras que el otro almacenaba 10.
Los hechos tuvieron lugar en la intersección de las calles 526 y 626, cuando la mujer se dirigía hacia la parada del colectivo. Repentinamente, fue sorprendida por el agresor, quien la golpeó y pateó violentamente en el suelo mientras ella clamaba por ayuda.